En la mayoría de los casos, reformar una vivienda
antes de venderla o alquilarla suele salir muy rentable. Una vivienda reformada
puede aumentar su valor entre un 20% y un 65%.
¿Qué aspectos son lo más valorados por los
compradores?
-La
luminosidad del inmueble. En este caso, poco puedes hacer si tu vivienda no es
luminosa, aunque puedes intentar potenciar la luz natural tirando paredes y
creando espacios más diáfanos que puedan dar acceso más luz a la estancia,
también incorporando colores claros en las paredes para dar una mayor sensación
de luz, por ejemplo.
-Una
cocina en buen estado y espaciosa. El precio de reformar la cocina suele rondar
los 1.500 euros por metro cuadrado, pero revalorizará mucho el precio de venta.
-La
eficiencia energética del piso. Cada vez más, los compradores se fijan en la
calificación energética del inmueble a la hora de adquirir una vivienda. Las
tecnologías que faciliten la vida (domótica). Persianas eléctricas, control de
climatización, iluminación?
-Baños,
como ocurre en el caso de la cocina, contar con baños reformados será un plus
que dará un buen impulso a la venta.
-Por
otro lado cuando se realice una reforma, rehabilitación, ampliación o cualquier
nueva construcción en una vivienda, ésta debe inscribirse en el catastro, por
lo que será necesario presentar una declaración catastral, en la que se
especifiquen las alteraciones producidas en el inmueble.